Museo del Ferrocarril de Madrid

El imponente edificio que acoge el Museo del Ferrocarril, construido como cabecera de línea en 1880, cuenta con una nave central en la que se encuentra la parte más importante del museo, la zona de los andenes y las vías donde se exponen las antiguas locomotoras.

En esta zona se pueden ver las primeras máquinas de vapor que circularon por el país, las primeras locomotoras eléctricas o los primeros motores diésel que se aplicaron a la tracción de los ferrocarriles.

En los andenes del Museo del Ferrocarril también se pueden ver antiguos coches de viajeros que muestran cómo era viajar en tren en el pasado, además de algunos antiguos vehículos de mantenimiento.

La sorprendente colección se completa con las piezas de modelismo ferroviario en diferentes escalas, además de tres maquetas animadas de diferentes épocas con las que los mayores disfrutarán como niños transportándose a través de paisajes imaginarios.

Un museo de lo más especial

El Museo del Ferrocarril es un espacio muy agradable que ofrece un viaje en el tiempo, hasta la época en la que viajar en tren era algo especial, y no solo una forma de transportarse. Aunque no forma parte de los principales museos de Madrid, si tenéis tiempo para visitarlo es una opción a tener muy en cuenta, especialmente para visitarlo con niños.

Mercado de motores

El segundo fin de semana del mes (salvo julio y agosto) de 11:00 a 21:00 horas el museo cierra su actividad ordinaria y se organiza en el mismo espacio el Mercado de Motores. Desde hace más de 10 años se reúnen en este espacio artesanos, diseñadores, artistas, creadores, productores de alimentación gourmet y especialistas en segunda mano en una actividad comercial que atrae tanto a familias, amigos y madrileños como a turistas.

De manera gratuita podréis acceder para degustar comida gourmet procedente de toda España y adquirir productor de todo tipo: objetos de diseño, de decoración, libros, accesorios, fotografía, cosmética y objetos de coleccionismo.